Enfoque
Introducción
El acoso escolar, también denominado bullying, es un fenómeno de especial preocupación en la actualidad, con una prevalencia alrededor del 11-19% en España. El bullying se define como aquellos actos agresivos y/o dañinos por parte de un alumno o conjunto de estudiantes que se llevan a cabo de forma intencionada y persistente en el tiempo hacia otro estudiante, y en los que hay una diferencia de poder. Este fenómeno acarrea numerosas consecuencias en víctimas y agresores. Ante esta problemática, se hace necesario profundizar en el estudio de este fenómeno, analizando posibles variables asociadas al mismo.
Objetivo
El presente estudio pretende analizar a los agentes implicados en la dinámica bullying, agresores y víctimas, en una muestra de alumnos de educación secundaria obligatoria; y posibles variables relacionadas con estos perfiles, como el género y repetición de curso. Asimismo, también se estudia la vinculación existente entre estos agentes y su nivel de satisfacción con la vida.
Metodología
La muestra está constituida por 57 alumnos, 38,60% chicas y 61,40% chicos, de entre 13 y 16 años. Todos ellos son estudiantes de 3º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) de un instituto público de Málaga. El procedimiento utilizado fue el siguiente: se realizaron reuniones con el director y el Departamento de Orientación del centro educativo exponiendo los objetivos de la investigación. Una vez se obtuvieron los permisos pertinentes, se continuó con la aplicación de los cuestionarios. De este modo, se administró el test BULL-S (Méndez y Cerezo, 2010) para identificar a los agresores y víctimas implicados en la dinámica bullying; así como la Escala de Satisfacción con la Vida (SWLS) (Diener et al., 1985; Atienza et al., 2000; Pons et al., 2002) para medir este constructo.
Para el análisis de datos, se ha empleado el programa estadístico SPSS 20.0, analizando el Chi-Cuadrado de Pearson (X2) y la Razón de Verosimilitud.
Resultados
Los resultados obtenidos indican que hay diferencias de género en la dinámica de bullying (LR = 12.397; p = .002). Sin embargo, no se encuentran diferencias estadísticamente significativas entre la repetición de curso y la dinámica de bullying (LR = 6.077; p = .193). Tampoco se encuentran diferencias estadísticamente significativas en dinámica de bullying según el nivel de satisfacción con la vida (LR = 5.994; p = .424).
Conclusiones
Podemos concluir que los varones ejercen más el rol de agresor en comparación que las chicas y no hay diferencias de género en las víctimas. No se encuentran diferencias de rol en la dinámica de bullying según la repetición de curso. No se obtienen diferencias significativas en la satisfacción con la vida de los agresores y de las víctimas.