Enfoque
El origen evolutivo de las relaciones de pareja podemos situarlo la primera intención de unión para satisfacer necesidades como la procreación, pertenencia, apoyo, afiliación o asegurar la crianza y para lo que han generado vínculos estables y complejos posibilitando la supervivencia de la especie. No obstante, para cubrir estas necesidades no haría falta más que una atracción sexual sin ser necesaria la experiencia del amor. Sin embargo, en el establecimiento de las relaciones de pareja no sólo intervienen mecanismos como la atracción o la satisfacción de necesidades, sino que tanto la cultura como la sociedad han intervenido de forma decisiva a lo largo de la historia
Por su difícil conceptualización y delimitación, el amor es entendido de muy diversas formas dentro de las relaciones de pareja. Específicamente, la psicología social ha definido el amor como una construcción social, como una emoción, resultado de la combinación entre atracción física, deseo de ayudar, compartir emociones y experiencias y la idea de exclusividad, así como, una motivación cuyo fin es la búsqueda del bienestar de la persona amada. Y, producto de su estudio empírico, a partir de esta perspectiva surgieron diferentes teorías y operacionalizaciones del amor en base a los estilos, dimensiones o actitudes que lo caracterizan.
El amor es una de las emociones complejas más intensas y buscadas por el ser humano y se ha convertido en un tema de alta demanda en el ámbito de la psicología social. En los últimos cincuenta años se han realizado numerosas investigaciones sobre el amor tratando de analizar de manera empírica sus componentes y formando un cuerpo teórico sobre el amor abordándolo como un concepto global o multifactorial.
Dentro de las teorías más importantes propuestas sobre la naturaleza del amor encontramos la TeoríaTriangular de Sternberg que pretendía abarcar tanto la estructura como la dinámica del amor tratando de abordar todas las tipologías existentes. Para ello, planteó la existencia de tres elementos básicos la intimidad, la pasión y el compromiso de cuya combinación surgirían los diferentes tipos de amor en función de la presencia o ausencia de cada componente.
A partir de esta teoría, se planteó estudiar el estilo de amor predominante entre los estudiantes universitarios en función de la variable sexo y determinar las diferencias existentes en la forma de vincularse dentro de las relaciones de pareja entre hombres y mujeres.
Para ello, elaboró un estudio cuasiexperimental de corte transversal empleando como muestra de estudio 1083 estudiantes de la Universidad de Extremadura, 468 varones y 615 mujeres de entre 17 y 25 años. Los instrumentos empleados para la recogida de datos fueron un cuestionario de datos sociodemográficos elaborado ad hoc y la Escala Triangular del Amor de Sternberg.
Los resultados de la investigación evidencian que en las mujeres predomina el estilo de amor romántico mientras en los hombres un estilo de amor más pasional y carente de compromiso. El estudio muestra diferencias significativas entre hombre y mujeres en sus estilos de amar lo que puede afectar al establecimiento de relaciones sanas, satisfactorias y perdurables en el tiempo tanto por sus diferentes expectativas como por la carencia mostrada de compromiso.
