Enfoque
El maltrato infantil, según la OMS, se define como “cualquier forma de abuso o desatención que afecte a un menor de 18 años, abarca todo tipo de maltrato físico o afectivo, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial o de otra índole que vaya o pueda ir en perjuicio de la salud, el desarrollo o la dignidad del menor o poner en peligro su supervivencia en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”. Aunque es un problema que ha existido siempre, su estudio es complicado porque en la mayoría de los casos ocurre en el seno de la familia y por diferentes motivos no se revela. Aun así, existen evidencias de un incremento de los casos en los últimos años, en parte posiblemente por la mayor atención social e institucional que se ha puesto en la exposición de los menores a la violencia de género.
El papel del psicólogo forense en estos casos es complejo pero determinante, por la relevancia de la declaración del menor que generalmente es el único testigo y debe estar sujeta a un análisis de credibilidad, y porque se debe evaluar la repercusión psicopatológica a corto y a largo plazo en su desarrollo evolutivo para establecer medidas eficaces que garanticen la protección.
Con objeto de ejemplificar las dificultades que enfrenta el psicólogo forense en los casos con menores involucrados, se presenta el proceso de evaluación pericial de dos niños que son al mismo tiempo víctimas de maltrato por parte de la pareja de su madre y testigos de violencia de género. A petición del padre en este caso, se realiza una evaluación para comprobar la existencia de malos tratos que hayan afectado a la estabilidad emocional de los menores y la valoración de las posibles secuelas psicológicas derivadas de ellos. El informe resultante de dicha evaluación pasa a formar parte del proceso penal contra el presunto autor de un delito de lesiones contra los menores, y será relevante posteriormente del procedimiento de guarda y custodia.
Durante el proceso se evaluaron las siguientes áreas: a) tipología de maltrato y autores; b) gravedad de las situaciones de riesgo, desamparo y desprotección infantil; c) presencia de psicopatología atribuible a la exposición directa e indirecta a la violencia; d) capacidad intelectual; e) credibilidad de los testimonios; f) grado de adaptación en el área personal, escolar, social y familiar tras un cambio de residencia por medidas provisionales sobre guarda y custodia.
Se detallarán los instrumentos de medida aplicados para dar respuesta a las preguntas periciales, y los resultados principales obtenidos en cada una de ellas, con especial énfasis en las medidas de inteligencia y la valoración de la credibilidad del testimonio. Por último, se expondrán y analizarán los factores que dificultan la exploración pericial psicológica en menores, así como las consecuencias que provocan las distintas formas de maltrato y exposición a la violencia en la infancia.
